El origen y las leyendas del café dieron mucho que hablar en cientos de años
La historia del café empieza cerca del siglo XIII, pero no entendemos con exactitud cuándo, porque no poseemos documentos escritos sobre cuándo empezamos a utilizarlo como bebida refrescante. Lo que poseemos son las leyendas, por eso deberan ser útil.
La primera dice que un místico sufí yemenita, Ghothul Akbar Nooruddin Abu al-Hasan al-Shadhili, viajaba por Etiopía y en ese viaje notó algunos pájaros inusualmente vivos. Probó las bayas que vio que los pájaros estuvieron comiendo y sintió el mismo vigor. Las bayas eran las cerezas del café.
La segunda leyenda dice que el café se descubrió por un discípulo del jeque Abou’l Hasan Schadheli – Omar. Aunque era popular por su capacidad para sanar a los enfermos por medio de la oración, una vez fue exiliado de Moca a una cueva del desierto cerca de Ousab y se encontraba intentando de subsistir. Mientras probaba algunas bayas de un arbusto, las descubrió amargas. Las asó y hirvió y tomó una bebida con la que se sintió mejor. Cuando las historias de la bebida llegaron a Moca, se le pidió a Omar que regresara y se le logró un santo.
La tercera leyenda dice que un pastor de cabras notó que sus cabras se comportaban inquietas cuando comían bayas del arbusto, por eso las probó él mismo.
La historia nos comunica lo opuesto. La primera prueba de consumo de café hace aparición en la época del siglo XV, en los monasterios sufíes del Yemen en el sur de Arabia. Llegó ahí desde Etiopía, donde era originario. Desde ahí el café se extendió a Egipto y al norte de África. Para el siglo XVI, era popular en el resto de Oriente Medio, Persia y Turquía. Oriente Medio fue el punto desde el cual el café se extendió a Italia y de ahí al resto de Europa. Los holandeses transportaron el café a las Indias Orientales y a las Américas.
Luego de Venecia, donde el café fue el primero en Europa, los primeros cafés reales se dieron a conocer en Viena en 1683 luego de la Guerra de Viena. La Empresa Británica de las Indias Orientales y la Empresa De holanda de las Indias Orientales importaron el primer café a Enorme Bretaña en el siglo XVI. En 1669, Soleiman Agha, embajador del Sultán Mehmed IV, trajo una cantidad enorme de granos de café. Los puertos del Mar del Norte de Alemania tuvieron las primeras cafeterías alemanas en el siglo XVIII. Gabriel de Clieu llevó los plantones de café a Martinica en el Caribe en algún instante de 1720, en tanto que el café fue introducido en Brasil en 1727.
El café fue introducido en la India en 1670 y desde ese momento se cultiva el café. Japón fue el primero en escuchar comentar del café en el siglo XVII, pero se vio muy afectado por las prohibiciones comerciales y las barreras a la importación que se produjeron ocasionalmente. Actualmente, Japón es uno de los más importantes clientes de café per cápita en el planeta.